Según expertos de Centro de Investigación de Vacunas del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas en Bethesda, Maryland la disponibilidad de vacunas en respuesta a las nuevas infecciones emergentes se ve obstaculizada por el tiempo que lleva diseñar, fabricar y evaluar las vacunas para uso clínico; además que desde el proceso de desarrollo hasta la obtención de la licencia pueden pasar décadas.

Casos como el coronavirus son un desafío para los funcionarios de salud pública ya que estos generalmente son brotes de enfermedades virales, en ocasiones de naturaleza pandémica que requieren vacunas para una contención y manejo adecuado.

Aun así, los expertos dicen que no todo está perdido. Los avances tecnológicos y las nuevas herramientas permiten que mediante secuenciación genética las vacunas pueden desarrollarse, fabricarse y administrarse de manera más eficiente que en épocas pasadas.

Las herramientas adicionales de la vacunología moderna incluyen (1) la delineación de estructuras de proteínas virales a nivel atómico que facilita el diseño de inmunógenos y la ingeniería de proteínas con estructura habilitada; (2) tecnologías de clasificación y secuencia de células que permiten el análisis unicelular de respuestas inmunes; y (3) tecnologías genéticas que permiten la construcción de modelos animales con genes de anticuerpos humanos para pruebas de vacunas. Estas herramientas ya han proporcionado el potencial no solo para resolver problemas de larga data en vacunología, como el desarrollo de una nueva vacuna candidata para el virus sincitial respiratorio, sino que han facilitado el desarrollo rápido de nuevas vacunas candidatas para los patógenos emergentes como el virus Zika y cepas pandémicas del virus de la gripe.

En resumen, las enfermedades virales emergentes con potencial pandémico son un desafío perpetuo para la salud mundial. El enfoque tradicional de la vacunología, que depende principalmente del aislamiento y el crecimiento del patógeno, no ha respondido adecuadamente a este desafío. Para prepararse y responder eficazmente a estas amenazas continuamente emergentes, será fundamental explotar los avances tecnológicos modernos, establecer de manera preventiva información detallada sobre cada familia de patógenos virales e invertir en más infraestructura para la vigilancia en los países en desarrollo para acelerar la identificación de patógenos y poner en marcha el proceso de desarrollo de vacunas utilizando estas nuevas tecnologías. 2 De lo contrario, se producirá una situación insostenible de no utilizar óptimamente la vacuna en la respuesta a las nuevas amenazas de enfermedades infecciosas emergentes.

Información del artículo

Autor para correspondencia: Anthony S. Fauci, MD, Laboratorio de Inmunoregulación, Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, 31 Center Dr, MSC 2520, Bldg 31, Room 7A-03, Bethesda, MD 20892-2520 ( afauci@niaid.nih. gov ).

https://jamanetwork.com/journals/jama/fullarticle/2676502

JAMA 2018; 319 (14): 1431-1432. doi: 10.1001 / jama.2018.0345